viernes, 18 de septiembre de 2015

tiembla tucuman

Álvaro Aurane | LA GACETA
La tierra ha temblado bajo nuestros pies para que los tucumanos asumamos que esta provincia de comicios anulados ha entrado, naturalmente, en el territorio de la incertidumbre plena.

La Sala I de la Cámara Contencioso Administrativo ha declarado nulos los comicios del 23 de agosto y ha ordenado que se celebren nuevas elecciones, pero todavía no es seguro que, efectivamente, vaya a haber otra votación en la Provincia. Lo que sigue, en las próximas horas, es que el Estado provincial va a recurrir (lo que vulgarmente se conoce como “apelar”) este fallo ante la Corte Suprema de Justicia de la provincia. El objetivo que perseguirá el gobierno de José Alperovich, por supuesto, será que los jueces supremos convaliden la votación.

Dos posibilidades generales se abrirán entonces: que el superior tribunal ratifique la nulidad de la elección, o que, por el contrario, las considere válidas. No importa cuál sea la resolución, en Tucumán la Junta Electoral Provincial no podrá proclamar “electo” a ninguno de los 93 delegados comunales, a ninguno de los 182 concejales, a ninguno de los 19 intendentes, a ninguno de los 49 legisladores ni mucho menos al gobernador y al vicegobernador que, en un -ya lejano- principio, debían estar en funciones el 29 de octubre próximo.

¿Por qué no habrá proclamaciones, entrega de certificados ni mucho menos juramentos ni ceremonias de asunción? Porque el Estado provincial jamás recurrió la medida cautelar dictada del pasado martes 8, que le ordenó a la Junta Electoral abstenerse de declarar ganadores de los comicios en cualquiera de las categorías. Como nunca la objetaron, la medida quedó firme a las 10 de la mañana de hoy, y ese es un hecho de una importancia meridiana en este proceso.

Aún en el mejor escenario posible para el oficialismo, el de la Corte provincial revirtiendo el fallo de la Sala I del fuero Administrativo, la validez de los comicios y la proclamación de candidatos “electos” seguirá suspendida. Es que el opositor Acuerdo por el Bicentenario acaba de lograr una sentencia favorable a su amparo y, entonces, si sufriera un revés judicial, podrá acudir a la Corte Suprema de Justicia de la Nación (por la vía del Recurso Extraordinario Federal) con “efecto suspensivo”. Es decir, como ya hay un tribunal que le da la razón, eventualmente podrá pleitear en la Nación sin que cambie la situación en Tucumán, hasta que el supremo tribunal nacional dé la última palabra.

Esto, para mayor incertidumbre, pone a caminar a la provincia por el filo de la intervención federal por dos cuestiones, ambas vinculadas con “plazos”. El más urgente de esos plazos es el ya referido 29 de octubre. Ese día, concluye el mandato 2011-2015 para todos los cargos electivos de esta provincia. El otro “plazo” está escrito en el artículo 163 de la Constitución de Tucumán, sancionada el 6 de junio de 2006. Sí, el 6 del 6 del 6. Y dice: “La Legislatura deberá dictar la Ley de Acefalía dentro de los ciento veinte días de sancionada la presente Constitución”.

Nunca se dio cumplimiento a esa disposición constitucional, entonces sigue vigente la Ley 6.341, que establece que, en caso de acefalía definitiva o vacancia del Poder Ejecutivo, la gobernación será ejercida por un legislador o… por un legislador. De modo que si el 29 de octubre no se ha resuelto el conflicto, y no han asumido las nuevas autoridades, no habrá nuevo gobernador ni tampoco un legislador que lo suplante. Ante el vacío en el Poder Ejecutivo y el Legislativo, la Nación podría considerar a Tucumán incursa en la causal del artículo 6 de la Constitución argentina: “El Gobierno federal interviene en el territorio de las provincias para garantir la forma republicana de gobierno”.

Tucumán está temblando. El sismo de las 19.58 ha sido tan sólo una natural obviedad.

Wereltineck renovó sus críticas al intendente de El Bolsón

Wereltineck renovó sus críticas al intendente de El Bolsón

En campaña, el gobernador recorrió ayer obras en ejecución en esta ciudad y entregó dos camiones para el Splif y el Servicio Forestal Andino.


Alberto Wereltineck recorrió ayer obras en ejecución en esta ciudad y entregó dos camiones para el Splif y el Servicio Forestal Andino. Luego, en el marco de un acto de campaña para acompañar a su candidato a intendente, Bruno Pogliano, criticó la gestión del actual jefe comunal, con quien está enfrentado desde hace dos años.

"No quiero venir más a El Bolsón y no tener con quien hablar, por eso a futuro vamos a mejorar y construir el vínculo entre la ciudad y la provincia", resaltó al tiempo que pidió "basta de divisiones, agravios y peleas, pero fundamentalmente basta de hacerse la víctima. Lo que tenemos que hacer es gobernar, tomar decisiones, pedir disculpas si nos equivocamos, pero no echar la culpa al otro de la mañana a la noche. Eso marca que no sabe siquiera cuál es su proyecto o adónde quiere ir para llevar adelante su pueblo", dijo en directa alusión a Ricardo "Caleuche" García.
A su criterio, "ninguna ciudad de Río Negro se puede desarrollar, crecer o resolver sus problemas de espaldas a la provincia, que siempre es protagonista".
A primera hora, el gobernador visitó el Jardín de Infantes del barrio Luján, que estará inaugurado para el próximo ciclo lectivo. Enseguida fue hasta la nueva obra de captación y almacenamiento de agua potable, que duplicará la provisión con una cisterna de 500 metros cúbicos, ya con un 97% de avance. Más tarde, en un local colmado de militantes de Juntos Somos Río Negro, Wereltineck recordó que en El Bolsón "podríamos haber hecho muchas cosas más si hubiésemos tenido otro tipo de vínculo" con el municipio. "No importa el partido político al que cada uno pertenezca, lo que importa es a que intereses defiende o representa; aquellos que viven pensando lo que le van a decir desde Viedma o desde Buenos Aires, son los que se empiezan a olvidar de su comunidad", acotó.
Enseguida reprochó que "todavía no hemos podido hacer un solo plan de viviendas porque la municipalidad nunca definió las tierras, tampoco completar las redes de gas porque no hay manera de normalizar la situación de los barrios. No hemos podido definir un plan de turismo para aprovechar el potencial que tiene esta región y ponerlo en valor en todo el país".
Desde su óptica, "esta elección ya está ganada, el pueblo de El Bolsón ya decidió por el cambio, así lo demuestran las encuestas y la calle, que prefiere este proyecto encabezado por Bruno Pogliano".
Por último, el gobernador prometió volver "la próxima semana para firmar el compromiso programático sobre las obras que vamos a hacer en El Bolsón durante los cuatro años venideros" y adelantó que "el 25 de octubre a la noche voy a estar con ustedes para festejar el triunfo".
Agencia El Bolsón